Vaya Futuro tuvo su último concierto el año pasado por noviembre en el Foro Indie Rocks! Ellos mencionan que al principio estaban dudosos de participar, pero como necesitaban para comprar y arreglar los últimos detalles para grabar lo que sería “El Peso del Mundo”, la tomaron.

Este año querían publicar este disco y presentarlo de una manera original pero llegó la pandemia y ahora todo cambió. Tuvimos oportunidad de charlar con Miguel Aguahe, baterista desde el inicio y esto fue lo que nos contó.

Hablamos de un show por necesidad que no iban a tomar ¿te hubieras arrepentido sino la ubieras agarrado antes de esto?

M: No, realmente no, ahorita que lo preguntas, como estábamos metidos en el disco, tocar en vivo pasó a segundo término. Fue un trabajo de un año experimentando, re grabando, haciendo cosas que nunca habíamos hecho y disfrutamos mucho, es la primera vez que hubo satisfacción de estudio que tocar en vivo.

¿Cuál fue el mayor recuerdo en el estudio?

M: Justamente el primer día del estudio, como teníamos ideas con las baterías empezamos a tomar una técnica nueva donde pasamos la batería por modulares, un día viendo tutoriales del porque no sonaba, está sonando doble, este primer encuentro de máquinas desconocidas; hubo una canción que Luis programó la batería a í me gustaron mucho y dije “sabes qué, las quiero tocar igualito” y me dijo “date”, ese día era cumpleaños de su papá y se tuvo que ir y le dije al Rodo “voy a tu casa a grabar”, estuvimos pedos, justamente no entendíamos que había hecho Luis, pasaba de 5/4 a ¾, cambiaba de tempo, era un desastre la estructura de la canción.

En mi cabeza era bien fácil pero luego fueron 10 horas de grabar.

¿Quién fue el productor?

M: Fuimos los tres de la banda, Luis, Rosy y yo 100% produciendo el disco, peleándonos entre nosotros, mezclándolo mil veces; es el disco que más le hemos metidos los tres, somos una banda pero no hubo un externo.

Me mencionas tres personas, supongo que hubo momentos de fricción ¿fue complicado?

M: Sí, lo bueno es que nos conocemos desde hace 10 años, sabemos que botones tocarnos y donde presionarnos, par ano ir para atrás, existía este colectivo de tres cabezas queriendo llegar a la meta, nos íbamos agarrando de la mano, no importa que la cagaste, a ver como la inflamos, llegar a este nivel los tres, todo se dio muy natural.

Estas situaciones de lanzar el disco ¿Cómo se quiere presentar, será streaming o un formato diferente?

M: Hemos tenido esa plática interna muchas veces, hemos estado en contra del live streaming, no porque estén mal hecho o algo, sino porque nosotros no orillarían hacer una entrega más diluida o menos especial como lo hemos pensado.

El disco necesita un show que se comparé a la grabación, estamos con un chip interno que nosotros solitos nos metimos el pie, es una discusión interna de “hacemos, o no”, si matamos esa sorpresa en vivo, como que ya no será especial. Siempre tendremos esas pláticas.

¿Cuál sería la canción que represente este nuevo disco?

M: “Florecer/El Eremita”, es una canción de 8 minutos con los arreglos más bonitos y es la menos oscura.

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