Una entrada corta de espera, sabiendo que eran dos bandas abridoras, es más que obvio tener en cuenta que el tiempo de exposición es mínimo. 30 minutos fueron ejecutados por estos chicos argentinos que demostraron un respeto y agradecimiento ante el público, ya conocidos por cierto. La calidad se notaba en sus primeros acordes, pero en el caso de Agustín (el guitarra), se topaba con dificultades en su instrumento al no tener un nivel apropiado, exigiendo respuestas por parte del staff más de 3 ocasiones. Su tecladista Rama, es uno de esos elementos que se comparan en la cocina, es ese toque que da sazón al platillo pero no es muy ocupada en el escenario, me hubiera gustado verla más en acción, a veces se organizaba una rola si, otra no. Tuvimos el privilegio de escuchar por primera vez en vivo “Cosmos” (al menos eso quiero creer), ya que un día antes este sencillo fue publicado de manera oficial en plataformas digitales. Algo que me dejo pensando que el staff no venía incluido en su presentación, fue que ellos ya se habían despedido y retirado, no pasaron ni 5 minutos para regresar y tomar sus cables, sus platillos y controles para que el siguiente grupo se acomodara. En conclusión, tardaron en prender a la gente, pero muchos ya sabían a lo que iban, tienen calidad, aunque no mucho sobresalto.

Un mes atrás, se empezaron hacer diferentes actividades de convivo por parte del grupo para animar a la gente a comprar su boleto, desde una reta de fútbol hasta una firma de autógrafos. Eso habla de un dinamismo, mismo que viví en persona al ver a un grupo de jóvenes que concursaban para ganarse un acceso al backstage, no me acuerdo que marca lo organizo pero para la gente que es fan, debió ser el mejor puto día de su vida. Yo tuvo la oportunidad de poder entrevistarlos previo al concierto y con el tema de su participación en circuito indio (entrevista cual puedes escuchar en nuestro canal de soundcloud). Obviamente una gran entrada después de 45 minutos de espera, al 10 para las 10 ya era ansias sudadas. La segunda rola que prendió a todos fue nada más nada menos que “Surveillance Carmera”.Diego Solórzano con un atuendo muy Niel Amstorm, hizo carisma con su público de diferente manera, al subirse a la valla y cantar sobre ellos, al usar una gorra que fue aventada por un fan y usarla con entusiasmo. “The Future Sugar” nos recordó cuando todos creíamos que Rey Pila fue un grupo de nuestra prepa pero retornaba con fuerza; en el intermedio empezaban canciones del primer disco, donde muchos coreábamos “Una vez más” en “No. 114”, la única en español. Otros clásicos como “Alexander, Pictures of the Sun y Fire Away”. Los nuevos temas también impresionaron, “How Do You Now? Y Ninjas”. Más de una hora se nos fue concedida, y como no nombrar uno de las mejores presentaciones del grupo, creí que no estaba agotado el evento, pero resulta que el mero día dan la noticia, si había demasiada genta tanto en el palco como en la zona general. Al final del día, los que estuvimos presentes y ya conocíamos al grupo, recordamos y nos divertimos como antes, las nuevas generaciones ya pueden presumir de ellos, y los que no los vieron, puff, ni tienen el derecho de llamarse fans. Con un circuito indio, provincia gozará del ritmo, no tanto como nosotros obviamente, y un paso más en su carrera, su gira con Julian Casablancas les espera nuevas experiencias.