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Esta noche de viernes nuestro venue favorito de la Condesa lucía diferente, estaba lleno de sillas, el ambiente no era el mismo, no es a lo que estamos acostumbrados, pero un aire de misticismo llenaba el lugar.

El show comenzó, las guitarras y percusiones sonaron por todo el recinto, y la verdad no pasó mucho para que la gente se pusiera de pie para dejarse llevar por la voz del español. El público cantaba y se contoneaba en sus lugares, se les veía felices y Juan lo notó, así que no perdía oportunidad de convivir con ellos. El mood era perfecto, chill pero con pasión.

Las letras de El Kanka nos deleitaron, desde canciones de amor como "Por tu olor" hasta las que nos dicen que alguna vez en la vida debemos hacer lo que se nos dé la regalada gana, ya que como Juan mencionó al público "somos seres sociales, pero a veces está bien no complacer a los demás", y por puesto también canciones con un toque optimista como "Sí que puedes".

El momento de la noche se lo llevó "Vengas cuando vengas" pues ya había una conexión especial con los asistentes, así que El Kanka decidió hacer una dinámica: poner a cantar a todos, y bueno, estamos en México, si para algo somos buenos es para organizarnos en este tipo de cosas. Así que la mitad del público cantó una parte del coro y la otra mitad el fondo del mismo ¡Qué bonito todos al unísono!

Juan presentó a los integrantes de la banda, haciendo incapié en que es la única banda que es más guapa que el cantante, toda la noche hubo intervenciones de ese tipo. Tal parece que los españoles se sienten bastante cómodos en México y lo demuestran con esa familiaridad en el escenario.

Buena música y una voz que inspira fue lo que apreciamos. Noche lluviosa que tuvo el mejor soundtrack.