En el marco de la premiere del filme “Le Viol Du Routier” en nuestro país, se contó con la presencia de la directora Juliette Chenais de Busscher y la actriz protagonista Flore Abrahams en la sala 9 de la Cineteca Nacional. Nuestra corresponsal Jimena Colunga Gascón tuvo horas de espera para poder traernos una entrevista de un lenguaje distinto en el cine actual y hablar con detalle de una cinta con mensaje social y protesta de género, desafortunadamente, sólo se tuvo el espacio para hablar con Flore Abrahams; aquí la plática para su disfrute, y si con esto no te animas a ver la película, no sabemos cómo convencerte.
Jime: Primero que nada, muchas gracias por estar aquí. Me gustaría saber sobre el proceso creativo que tuviste para desarrollar este personaje.
Flore: Fue muy particular porque Juliette no escribió nada antes del rodaje, así que construí la psicología de mi personaje mientras rodamos. También fue muy especial porque creo que ella estaba inspirada en mi personalidad y mientras viajábamos hacia las locaciones me dio algunas referencias en cine como “Le Bonheur” de Agnes Varda, el personaje joven de Nymphomaniac, de Lars Von Trier, en la primera parte, también una película francesa que se llama “La vie reveé des anges”, con Natacha Régnier, y este tipo de escenas. Desde el principio yo sabía que mi personaje había sido violada, no filmamos esta escena al principio sino al final después de todo lo que pasó, y siempre supe que ella tenía este trauma y no quería mostrar este aspecto, no quería fallar, no quería hablar del tema, ni siquiera con su amiga, porque de hecho, el otro personaje no sabía nada tampoco, no lo mostraba a nadie y no sabía exactamente qué pensar. Su violación no es una común, es mucho menos violenta, de alguna manera consensuada para escapar de una situación. Creo que muchas mujeres no saben cómo tomar esto, es difícil de asumir.
Jime: Claro, de hecho, esa iba a ser mi siguiente pregunta: ¿cuánto de ti crees que hay en el personaje de Tamara?
F: (Se ríe) ¿Cuánto habrá? 50… o tal vez más, como 70%. Es curioso porque a la distancia veo que durante el rodaje fue todo muy instintivo, no tenía esa idea. Ahora, cuando veo la película me doy cuenta que de hecho sí era mucho como ella, Flore era como Tamara.
Jime: También vimos que participaste en el proceso de edición de la película, ¿nos cuentas más de esto?
F: Sí, pero de hecho yo no soy técnica en edición, Juliette es la que sabe cómo hacerlo, y yo sólo contribuí porque me quedé al visionado, di mis comentarios y sugerencias. Fue más como un primer asistente de edición.
Jime: Durante la conferencia nos hablaste sobre tus referencias en actrices alrededor del mundo, ¿podrías contarnos de tus referencias en el arte en general?
F: ¡Claro! Louise Bourgeois, es una referencia muy fuerte en el arte y también para las mujeres. En su arte tomó mucho de la violencia contra las mujeres y de la violencia sexual contra las mujeres. Hay una estatua que es un hombre con un pene enorme y se llama en francés “Fillette”, que quiere decir “Niña Pequeña” y creo que habla sobre la agresión, el acoso y demás. Agnes Varda en el cine, desde luego. Frida Kahlo, en México y sí, es un buen ejemplo de una mujer fuerte en el arte. Tenía una discapacidad y es extraordinario que actualmente todos hablan de ella alrededor del mundo, pero para su tiempo era algo especial ser mujer y convertirse en una artista así de fuerte, conocida en todas partes. En el arte contemporáneo está Sophie Calle, por ejemplo, y debo admitir que Juliette (Chenais) ha sido un gran referente para mí como artista.
Jime: ¿Crees que el cine, de alguna manera, debe unirse a una ideología, por ejemplo, de género?
F: Creo que cine podría apoyar más el feminismo. Hoy nos damos cuenta de que las mujeres son también seres humanos, exactamente como los hombres, nos damos cuenta verdaderamente y es importante mostrar eso en películas, mostrar personajes fuertes con la misma fuerza que los hombres. Como decía en la conferencia, usualmente, este tipo de personajes, violadoras, vagabundas, rudas, son siempre escritos para hombres, nunca para mujeres, seguro debe haber un solo personaje de esos en películas en los últimos diez años. Normalmente las mujeres aparecen como reinas de belleza, muy lindas, siempre un objeto del deseo, pero no, las mujeres no son sólo eso y creo que es importante mostrar a las mujeres de manera distinta, que las mujeres pueden ser feas, naturales, locas, asesinas, gangsters o malas personas, eso es el feminismo.
Jime: ¿Qué sigue para ti después de esta película?
F: Ya hice otra película con Juliette, está terminada, el nombre es “Blue Passions”, en español es “Las pasiones azules”, ya empezó a editarla. Tengo muchos proyectos con ella y también continúo encontrando un lugar en el cine, tanto en Alemania, donde vivo, como en Francia, porque soy una actriz francesa.
Jime: ¿Algo más que quieras decir?
F: No, realmente estoy muy feliz de estar aquí en México. Tanto para mí como para Juliette fue una sorpresa, una buena sorpresa y es muy especial también ver el movimiento feminista, a todas las mujeres del mundo les llega este tipo de discurso, es un tema universal. Es increíble que hayamos hecho esta película en Francia, nunca pensamos que se pudiera ver en otros países, es una alegría venir y mostrarla, ver a gente conmovida por ella.